Es en París
el olor de la muerte.
Desolación.
Es en París
el luto de los hombres.
Llanto y dolor.
Es en París
donde morimos todos
hoy… ¿Y mañana?
Es en París
donde el crujir de dientes
hoy…¿Y mañana?
Es en París
donde empiezan el odio
y la venganza.
Es en París
la miseria del hombre
y de la raza.
Es en París,
París, París, París.
Era la nada.
©Santiago Pérez Merlo
Estremecedor. Cuanta sensibilidad, Santiago
ResponderEliminarQué pena que hayas tenido q escribir este poema sin tu sentido del humor habitual, pero por eso no deja de tocar el corazón. Todos estamos consternados con lo sucedido en París, pero tú lo has expresado con tanta sencillez y sentimiento!!! Muy bueno...
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