El espejo sólo miente
cuando no estás delante.
O cuando, ante ti,
hay un ente más grande
que te tapa sin que tú lo veas.
El poema sólo miente
cuando el poeta miente.
Y a este lado del espejo
y del poema
nos creemos el engaño.
Esa es la gran mentira.
Pero no es culpa del espejo.
Ni del poema.
Es un poema precioso...Yo creo que el verdadero poeta,núnca miente.Habla con su corazón si de verdad es poeta.Y el corazón no miente.Precioso poema.🥰🥰
ResponderEliminarMuchas gracias, Amelia. Yo ya no sé lo que es un poeta... pero sí sé que yo no lo soy... lo intentaré en otra vida 😘😘
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