El círculo más pequeño
es una pesadilla. El siguiente,
es una pesadilla compartida
sólo por unos pocos.
Le sigue otra pesadilla
que se va ampliando.
Fuera quedan los sueños.
Pero no hay
malos tiradores:
todas las flechas pinchan
donde duele.
Todos somos dianas y flechas ,en según que momento.Tenemos que olvidar como se dispara,para no herir.ni ser heridos.🌹🌹
ResponderEliminarA veces es la vida quien dispara... 🌼🌼🌼
EliminarMagnífico poema, Santiago!! Esta diana que describes se puede asimilar con tantas facetas de la vida... 👏👏👏🌼🌼🌼
ResponderEliminarChasgracias, Gimm. 🤗🤗🌼🌼🌼
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