La fiesta

Como uno de esos niños de Charles Dickens
miras desde el cristal a la gente que, dentro,
junto a la chimenea,
con gorros de papel y serpentinas
parecen disfrutar
la fiesta de una vida que a ti se te ha negado.
Con la frente pegada y apartando
de cuando en cuando el vaho
que se acumula
no querrías mirar pero no puedes
apartarte de allí y no comprendes
por qué ellos están dentro
mientras tú estás afuera y el frío
se apodera de ti.

©Santiago Pérez Merlo


2 comentarios:

  1. Bonito poema. Tierno, emotivo...esa alegoría de la ventana a través de la cual se mira la «vida de los otros» es muy sugerente y encierra muchas posibles interpretaciones. Tienes mucho mérito, poeta...

    ResponderEliminar
  2. Es un poema triste.. .Ver la vida a través de un cristal...posiblemente irrompible.Un poema lleno de sensibilidad.

    ResponderEliminar