Voyeur

Por ese diminuto agujero que has abierto
en tu vida -aún no sé muy bien dónde-,
te contemplo dormir.
Y te veo también en tu quehacer diario:
levantas a los niños, conduces, entras
en el trabajo y ordenas tus papeles
y te ríes, bostezas y respondes mensajes
y llamadas y hablas en idiomas que no entiendo.
Y te observo leer pero no se distingue
el título del libro
y preparar la cena y bañar a los niños
-con el rostro, también, difuminado-.
Te veo desvestirte y aparto la mirada
con pudor y miro
ese pijama breve que te espera.
No has tenido
una mala jornada, me parece.
Y se apaga la luz, un día más.
Buenas noches, amor, hasta mañana.

©Santiago Pérez Merlo


"El falso espejo", René Magritte

1 comentario:

  1. Muy bonito, Santiago. Me gusta mucho esta «historia de amor» tan sencilla, pero tan bien escrita. Aplausos..

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