La velada, 26 de mayo

En una tarde clara de Madrid teñida
del azul de las Islas
Canarias y del norte
se reunieron tres o cuatro poetas
-quizá cinco-
y no sucedió nada.
Sucedió la poesía en un jardín con vistas,
unas cañas, una de calamares
y una conversación no siempre trascendente...
Como si hubieran sido tres o cuatro
-quizá cinco-
individuos normales,

los poetas.

(Un pájaro rojo, eso sí, 
cantaba en algún árbol.)

©Santiago Pérez Merlo

1 comentario:

  1. Descriptivo, realista, pero muy poético...tienes la gran capacidad de dar rltmo de poesia a la narración más sencilla. Aplausos, Santiago

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