Te aviso: Voy a eructar muy alto en nuestra primera cita. Y quiero que, si puedes, aparezcas vestida con la ropa más cómoda que tengas, mejor si tiene manchas, si te está muy holgada y es gris oscura o de ese verde imposible que solo usas en casa. Si vamos a querernos, quiero que estén abiertos los botes de champú, la tapa del váter, levantada... Los cacharros sin fregar y la cama deshecha. Si vamos a querernos, no esperes desayunos con diamantes... Ni siquiera tostadas. Si vamos a querernos, que sea sin artificios, sin velas, sin sonrisas fingidas. No te pongas disfraces. No te depiles justo el día antes. No ordenes por colores tus camisas si no tienes por costumbre hacerlo. Duérmete en el sofá antes del primer beso. Si vamos a querernos, quiero que tú seas tú desde el primer momento. Me hace mas feliz oler tu primer pedo.